Han pasado 6 meses y 22 días desde que el querido amigo del barrio Martín Castañeda fue asesinado a sangre fría dentro de su domicilio y es fecha que las autoridades municipales y estatales no han dado declaración alguna sobre este terrible crimen.

Únicamente la alcaldesa Samantha Smith comentó que se revisarían las cámaras del C4 de la zona, pero sorpresa, que en esta colonia populocha -no hay cámaras de vigilancia.

Muchos vecinos, comerciantes y transeúntes ya están hasta el copete de la situación que viven día a día, primeramente porque no hay vigilancia en la zona, si bien es un sitio relativamente tranquilo, algunas veces hay actividades sospechosas de los amantes de lo ajeno que andan de trasnochadores buscando a ver qué se llevan entre sus manos de rata.

Lo más importante y alarmante es el seguridad vial porque si bien hay topes a lo largo de toda la avenida, desde la deportiva de Yerbabuena hasta la salida de la avenida Santa Fe, esto no es impedimento para que los motosimios que transitan en sus mortalikas agarren la vialidad como pista de carreras, también uno que otro conductor que anda haciendo ahí de las suyas y se brinca los topes aunque su suspensión les cobre factura después de la revisión mecánica.

A veces pasa alguna que otra patrulla de vialidad pero nada más se detienen a multar a uno que otro pichón que se encuentran distraído y proceden a “proceder” con su respectiva papeleta si es que estos no cooperan al darles la mordida correspondiente.

Esta situación a ocasionado que en días pasados un automovilista atropelló a un estudiante de secundaria que iba cruzando la calle, precisamente por el paso peatonal y el conductor al ir distraído, no alcanzó a frenar y se lo llevó de corbata.

Muchos niños, jóvenes, adultos y adultos mayores cruzan todo el día las calles y la mayoría de los conductores no tienen la cultura vial de detenerse para darles el paso a pesar que ven a viejecitos cargados con sus bolsas de mandado o estudiantes de primaria, secundaria o prepa que quieren cambiarse de banqueta para poder llegar a su destino.

Mientras la alcaldesa anda en modo farándula, viajando con sus directores, regidores, achichincles jugando a la influencer, la ciudad se desmorona como bolillo viejo.

Ojalá todos los millones que se robaron, digo, se destinaron para la colocación de semáforos y la nueva ley de movilidad que impuso la alcaldesa, sirva de algo porque ya anda bien puesta para apropiarse de todo el transporte público y así seguir enriqueciéndose a costa de los más jodidos que somos nosotros los pobres ciudadanos que los estamos haciendo más ricos al no levantar la voz.

Si tienen alguna queja, duda o comentario no olviden mandarme al mail personal de este su servidor El Inspector Ranaxhuato inspectoranaxhuato@gmail.com también pueden dejarme recado con mis cuatachones de ND Noticias al 473-137-91-48